Gobierno nacional, productores y productoras campesinas de Boyacá y Cundinamarca trazan hoja de ruta ante retos de la producción
Productores de cebolla, papa y tomate de Boyacá y Cundinamarca optimistas ante acuerdos con el Gobierno nacional. Foto: Camila Polanco Pérez (ADR)
- Los campesinos solicitaron la instalación de un Puesto de Mando Unificado permanente en las fronteras, con el fin de que haya un control más estricto y eficaz del contrabando de cebolla peruana y venezolana.
- “Estamos trabajando con diferentes entidades del Estado, como el Ministerio de Educación Nacional, las fuerzas militares, el INPEC, entre otros, en un sistema de compras públicas”: presidente de la ADR
Bogotá, 04 de marzo de 2024 (ADR Colombia). Este sábado productoras y productores de cebolla, papa y tomate de Boyacá y Cundinamarca participaron en diálogo con entidades del Gobierno nacional, en cabeza del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, con el fin de establecer un plan de trabajo que garantice precios justos y un control efectivo de las fronteras para frenar el contrabando, entre otras preocupaciones.
El encuentro tuvo lugar en las instalaciones de la Agencia de Desarrollo Rural y contó con la asistencia de 60 campesinos de los municipios de Samacá, Cucaita, Sáchica, Sogamoso, Corrales, Santa Sofía y Une, así como de comerciantes de la Corporación de Abastos de Bogotá (Corabastos). En el encuentro, liderado por el presidente de la ADR, Luis Alberto Higuera, también estuvieron presentes el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), el Ministerio de Comercio, la Dirección de Gestión de Policía Fiscal y Aduanera – POLFA, y la Superintendencia de Industria y Comercio. La reunión tuvo como fin buscar soluciones a problemáticas campesinas relacionadas con siembra, sobreoferta, contrabando, comercialización y acceso a fertilizantes.
Los campesinos solicitaron la instalación de un Puesto de Mando Unificado (PMU) permanente en las fronteras, con el fin de que haya un control más estricto y eficaz del contrabando de cebolla peruana y venezolana. Igualmente pidieron un control de precios sobre las semillas, dado que los precios altos se mantienen a pesar de que el precio del dólar ha bajado.
Fredy Alberto Medina, productor de cebolla del municipio de Sáchica, se mostró satisfecho con los acuerdos firmados: “Tenemos mucha expectativa con estos compromisos, para que en la cadena de valor se vean los beneficios hacia los campesinos productores. Necesitamos precios justos que generen estabilidad económica para las comunidades rurales”.
Por su parte, el presidente de la Agencia de Desarrollo Rural, Luis Alberto Higuera, dejó ver su optimismo en el resultado de este encuentro: “La institucionalidad y los campesinos firmamos un acta que refleja el inicio de una ruta de acción para superar, en el corto plazo, los problemas de comercialización y sobreoferta. Para ello, estamos trabajando con diferentes entidades del Estado, como el Ministerio de Educación Nacional, las fuerzas militares, el INPEC, entre otros, en un sistema de compras públicas”. Agregó, además, que en el mediano plazo se prevé la posibilidad de construir plantas transformadoras de cebolla en la región.
Asimismo, el funcionario resaltó los compromisos y avances que se han venido gestionando por parte de la ADR, como es el caso de la formalización de pequeños productores, las pruebas piloto de la Alianza Nacional Agroalimentaria (ANA) y el diseño de un programa de tiendas dirigido al consumidor final. Todo ello, con el fin de promover la comercialización de productos provenientes de las organizaciones campesinas, indígenas, afrodescendientes y comunitarias.
Finalmente, el presidente Higuera recalcó que se ha venido trabajando en el Centro Agrologístico del Oriente, en Duitama, para identificar y desarrollar proyectos de transformación de productos agrícolas. Además, destacó que se busca la estructuración y financiamiento de un proyecto para la agroindustrialización de la cebolla en el municipio de Cucaita, Boyacá.
Al final del encuentro se planteó la necesidad de organizar reuniones de seguimiento interinstitucional, para evaluar los avances y tomar acciones adicionales según lo acordado en la hoja de ruta que busca soluciones para los pequeños y medianos productores de estos dos departamentos.