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Drones para cultivo de plátano en Urabá: tecnología al servicio de las víctimas del conflicto

La intervención del Gobierno nacional con proyectos productivos en territorios que han sido afectados por la violencia es el camino hacia la Paz Total. Foto- Mayred Silva (ADR)

La intervención del Gobierno nacional con proyectos productivos en territorios que han sido afectados por la violencia es el camino hacia la Paz Total. Foto- Mayred Silva (ADR)

  • Se hará una inversión de 15.300 millones de pesos destinados al cultivo tecnificado de plátano hartón, con fines de exportación. 
  • Cerca de 2.700 toneladas del producto se venderán en Estados Unidos y Europa, con unos ingresos anuales para pequeños productores por el orden de los 5.500 millones de pesos. 
  • El proyecto de la Agencia de Desarrollo Rural será una solución económica para 300 familias asociadas a la cooperativa PROASIV.

 San Pedro de Urabá (Antioquia), 23 de junio de 2024 (@ADR_Colombia). La Gira Semillas de Paz, emprendida por la Agencia de Desarrollo Rural (entidad del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural) para llevar proyectos productivos a las regiones que han padecido el conflicto armado, aterrizó esta vez en el Urabá antioqueño. La penúltima parada se hizo en San Pedro de Urabá y Turbo, dos municipios ubicados en el norte de Antioquia y con una historia de cuarenta años como prisioneros de la violencia sociopolítica y el conflicto armado. Las y los pobladores de estos dos municipios, ya cansados de ese mal que se les pegó como una sanguijuela, solo quieren que los dejen cultivar las tierras fértiles de sus llanuras.

Hasta allí llegó la Agencia de Desarrollo Rural (ADR), con una inversión de 15.300 millones de pesos destinados al cultivo tecnificado de plátano hartón, cuya producción ya tiene asegurada su venta en los mercados de Estados Unidos y Europa. Cerca de 2.700 toneladas del producto se venderán en estos países, con unos ingresos anuales para campesinas y campesinos por el orden de los 5.500 millones de pesos. El proyecto será una solución económica para 300 familias asociadas a la cooperativa PROASIV, quienes pondrán cada quien una hectárea de tierra dedicada a este cultivo.

Estos campesinos, que ahora serán empresarios, pertenecen a familias que sufrieron los rigores de la guerra, en una región en donde por años han campeado las economías ilegales de todo tipo, como la tala de bosques nativos, el contrabando y las rutas del narcotráfico hacia Centroamérica y el Caribe.

El proyecto tendrá un componente tecnológico para la fumigación de los cultivos mediante el uso de drones, los cuales serán operados por jóvenes campesinos de la cooperativa. Así lo resalta Daniel Gómez, gerente de PROASIV: “Esta es una gran innovación no solo para nuestro territorio rural sino para todo el Urabá, donde tradicionalmente la fumigación se hace con avionetas. Este equipo tecnológico de agricultura de precisión, que incluye dos drones para una fumigación eficiente, permite la inclusión generacional y de esta manera hacemos que el joven se quede en el campo produciendo”.

Nunca antes una inversión estatal, dirigida a pequeños productores de esta región, había tenido tal magnitud. Son más de 15.000 millones de pesos que recibirán los campesinos en activos productivos, herramientas, insumos, tecnología y adecuación de infraestructura de drenaje para la producción.

La intervención de Gobierno nacional en estos territorios se decide en común acuerdo con la población. De esta manera lo resalta el presidente de la Agencia de Desarrollo Rural, Luis Alberto Higuera: “Esta gira es para entregar proyectos reales, debidamente financiados, concertados con la comunidad y las asociaciones. Creemos que, de esta manera, con verdaderos proyectos sostenibles en el tiempo y que tengan visión empresarial y asociativa, lograremos terminar la pobreza”.

Con la entrega de este proyecto el Gobierno nacional envía un mensaje contundente a los grupos ilegales que aún persisten en la violencia contra la población del Urabá. Así lo dejo en claro el presidente Higuera, ante cerca de 500 campesinos que asistieron a la entrega del proyecto: “Las Autodefensas Gaitanistas deberían comprender que las realidades del conflicto han cambiado, que este Gobierno es inclusivo, que este Gobierno extiende la mano para plantear con la palabra, desde la diferencia, un camino de construcción de paz. Y, en nombre del Gobierno nacional, hago un llamado público que ojalá llegue a los oídos de esta organización: una sola vida que se salve justifica el diálogo”, puntualizó.

La Gira Semillas de Paz cerrará su periplo el 26 de junio en el municipio de Bojayá (Chocó), en donde la violencia dejó su miseria el 2 de mayo de 2002.

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